jueves, 20 de octubre de 2011

Las escuelas, los docentes y las Tics
                El desafío de la escuela no se trata simplemente de traer las Tics a la escuela, sino de incorporarlas para interrogarlas y analizarlas en sus lógicas y reglas, para explorarlas en todas sus posibilidades, para ayudar a los chicos y chicas a que vean cosas que todavía no pudieron ver por sí mismos. Seguramente esto implica familiarizarnos con tecnologías que hasta ahora vimos poco y de lejos; pero también implica afirmarnos en nuestros saberes de adultos. Introducir las Tic en la escuela no implica solo aprender nuevos procedimientos y el uso de novedosos aparatos. Más bien supone cambios que afectan los modos de hacer y de pensar sobre la información y el conocimiento. También modos de entender el mundo y de actuar sobre él.
            El primer paso en la interrogación de toda nueva tecnología es intentar hacer lo mismo que antes, pero con los nuevos “juguetes”. Jordi Adell describe una situación que parece inevitable: las personas hacemos lo que sabemos hacer aunque lo hagamos con nuevas herramienta …  Se trata de una tendencia generalizada y, por lo tanto, no resulta importante considerar si está bien o mal, es así.  Sin embargo, cuando sucede en las escuelas, esta situación parece intensificarse y, quizá, mantenerse en el tiempo más allá de ese primer paso que nos habla el autor. Gabriel Salomón se refiere a esto como la paradoja tecnológica, y plantea que es el resultado de una tendencia constante del sistema educativo a preservarse en sus propuestas asimilando las nuevas tecnologías a las prácticas educacionales existentes. Así la tecnología es domesticada de acuerdo con las prácticas habituales y termina adaptándose finalmente al cotidiano escolar, cuando una nueva tecnología cualquiera puede ser asimilada dentro de las practicas educativas existentes sin desafiarlas, sus posibilidades de estimular un cambio beneficioso son muy pocas y, por el contrario, tiende a empobrecer la actividad.
            La integración de las tecnologías en la educación trae consigo una serie de preguntas acerca de por qué y cómo incorporarlas a los procesos educativos, cómo relacionarlas con otras áreas y contenidos. Estos interrogantes remiten a debates respecto de integración de TIC en la enseñanza. En este sentido, podemos identificar dos posiciones frecuentes en las formas de integración de las tecnologías audiovisuales y digitales en la enseñanza.
            Una primera vertiente plantea la incorporación de estos recursos como materias o disciplina en la currila escolar. Desde esta perspectiva, la informática o los “medios” seguramente deben constituir una materia o asignatura específica.
            Una segunda perspectiva plantea que TIC podría ser un eje transversal en las áreas curriculares, de manera que, a la hora de abordarlas, los docentes podrían presentar el uso de recursos o la problematización de temáticas específicas que sean acordes al área curricular en cuestión,
            Desde esta ultima perspectiva, se contempla la posibilidad de incorporar a la enseñanza una variedad de recursos – elaborados con fines educativos y no educativos- que colaboran en el desarrollo de nuevas competencias a partir de los contenidos de cada área.
            Consideramos que estos recursos que pueden integrarse en los proyectos que desarrollan los maestros favorecerán las oportunidades de aprendizaje de los alumnos.
            Las distintas maneras de integración de TIC plantearán en cada escuela la necesidad de pensar en ellas, ya que su incorporación debe estar orientada a un uso fundamentado desde los supuestos pedagógicos que guíen su integración, considerando cada situación, proyecto y estilo particular.
             Al encarar la tarea de enseñanza, todos los docentes elaboran, analizan, deciden, eligen y responden algunas preguntas básicas acerca de qué, cómo, para qué enseñar, qué recursos incluir y cómo evaluar. Algunos lo hacen de un modo más sistemático y organizado, otros en forma más informal, o sin asignarle un tiempo determinado. Pero, sin dudas, todos responden esos interrogantes y las respuestas son las que guían, en gran parte, sus prácticas. La forma como se responda cada una de estas preguntas, priorizando uno u otro de los diversos elementos involucrados, definirá diferentes maneras de concebir la planificación de la enseñanza.
           


domingo, 16 de octubre de 2011

CONTAMINACIÓN Y SALUD

Vivimos en un ambiente esencialmente tóxico, contaminado. Eso a la larga está provocando la aparición de nuevas enfermedades, que acaban silenciosamente con la salud y la vida de muchas personas.

Observa  el Power Point y hace tu aporte...

http://www.slideshare.net/AOTSArgentina/nuez-larosa-contaminacion-de-los-principales-componentes-ambientales


http://www.slideshare.net/mfjv1527/contaminantes-y-fuentes-de-contaminacin

jueves, 13 de octubre de 2011

UN MUNDO SIN AGUA

El agua potable no es un recurso que abunde por el contrario solo el 2% del agua total del planeta es apta para el consumo humano.
Es un recurso vital para el ser humano y el derecho al agua potable y al saneamiento forma parte integrante de los derechos humanos oficialmente reconocidos en los diferentes eventos internacionales. Nunca se ha considerado el agua como lo que realmente es: un bien común universal, patrimonio vital de la humanidad. El acceso al agua debe ser considerado como un derecho básico, individual y colectivamente inalienable.


Mira el video y realiza un comentario.

www.youtube.com/watch?v=gIE0ijMQIe0&feature=related

lunes, 10 de octubre de 2011

Imágenes para ver



Un tema de interés global: La Contaminación.
                En general, se habla de contaminación cuando en la composición de elementos naturales como el aire, el agua o el suelo, se produce una concentración de ciertas sustancias que resulta perjudicial, tanto para el hombre como para los animales y vegetales, o amenazan el bienestar de las personas o el uso de ciertos bienes.
                El origen da la contaminación puede deberse tanto a procesos naturales como al desarrollo de actividades humanas. Así, por ejemplo, las erupciones volcánicas generalmente son procesos contaminantes del aire, ya que provocan una importante concentración de cenizas, polvos volcánicos y gases que, en ocasiones, perjudican a las actividades humanas, así como a distintos seres vivos y también deterioran los suelos. Muchas de las actividades humanas generan contaminación; es el caso del uso de los combustibles fósiles, como el petróleo, el gas o el carbón, cuya combustión produce una gran concentración de sustancias contaminantes en la atmósfera.
                A través de diferentes procesos físicos y químicos, los elementos naturales como el aire, el agua o la tierra poseen una cierta cantidad de disolución y autodepuración de las sustancias contaminantes. Sin embargo, muchas veces la cantidad de sustancias vertidas en ellos supera  esa capacidad y, en consecuencia, los procesos de contaminación se aceleran.
                Algunos de los residuos (sólidos, líquidos o gaseosos) producidos por las actividades humanas pueden ser destruidos y reciclados, en mayor o menor tiempo, por los organismos de descomposición presentes en la biosfera.  Estos residuos que pueden ser degradables por vía biológica se denominan biodegradables.
                Una parte muy importante de los residuos no son biodegradables y su presencia en la atmósfera, los suelos y el agua modifica en gran medida sus características naturales.
                Muchas veces, resulta difícil para los científicos determinar cuáles serán consecuencias precisas de un tipo de contaminación. Esto se debe, fundamentalmente, a que tanto la contaminación como la depuración natural de los lugares contaminados son procesos complejos  y de larga duración.